Como todos los años nos hemos felicitado, estamos compartiendo, deseando parabienes y algunos se quedan tan tranquilos creyendo que esto es como todos los años. No se equivoquen, este año no es como otros, este año todo es de verdad. Cuando deseamos que se recupere la generosidad y la justicia frente a la avaricia y la ambición, es de verdad. Cuando rogamos más inteligencia frente a la estulticia y la mediocridad, es de verdad. Cuando brindamos por los menos favorecidos, por los parados, por los que sufren, es de verdad y también lo es cuando queremos hacer desaparecer a esos ególatras frívolos que juegan con nosotros como si fuéramos piezas de ajedrez.
¡Señores nosotros somos de verdad.!
Deseo que lleguen los Reyes Magos con los sacos cargados de sentido común y de alegría (con lo que eso significa). Les recuerdo que ya no vienen de oriente, vienen de Cádiz y son de verdad.