Carreteras secundarias, autovías, aeropuertos, caminos, puertos, playa o montaña. Nos preparamos para soñar destinos, miramos guías, consultamos web de viajes y tomamos decisiones, viajamos antes, durante y después. Aprendemos, compramos, nos cansamos, conocemos, nos divertimos, lo contamos. ¡Ah! Eso, lo contamos. Mostramos las fotos, muchas, demasiadas: posados, morritos, paisajes. Viajamos, nos creemos importantes.
Por cierto, salgo ahora mismo y, sin maletas ni certificado de vacunación ni pasaporte, me siento en el suelo, me ajusto las gafas y despego dentro de un libro de Javier Reverte. ¿Me acompañáis? Hay sitio, es barato y siempre puedes volver, solo tienes que pasar página.
No hay comentarios:
Publicar un comentario